“Hoy reclamo los regalos que el perdón otorga.”

- No esperaré ni un sólo día más para encontrar los tesoros que Mi Padre me ofrece.
- Todas las ilusiones son vanas, y los sueños desaparecen incluso a medida que se van tejiendo con pensamientos basados en percepciones falsas.
- No dejes que hoy vuelva aceptar regalos tan míseros.
- La Voz de Dios les ofrece Su paz a todos los que escuchan y eligen seguirlos.
- Esto es lo que elijo hoy.
- Y así, voy en busca de los tesoros que Dios me dado.
- Busco sólo lo eterno.
- Pues tu Hij@ no podría sentirse satisfecho con menos de eso.
- ¿Qué otra cosa, entonces, podría brindarle solaz, sino lo que Tú le ofreces a su desconcertada mente y a su atemorizado corazón, a fin de proporcionarle certeza y traerle paz?
- Hoy quiero contemplar a mi hermano sin mancha ninguna de pecado en él.
- Eso es lo que Tu Voluntad dispone que yo haga, pues así es como podré contemplar mi propia impecabilidad.
Instrucciones de la Segunda Parte de Un curso de Milagros