“Yo soy el medio para la salvación, así como su fin.”

- En mí -el santo Hij@ de Dios- se reconcilian todos los aspectos del plan celestial para la salvación del mundo.
- ¿Qué podría estar en conflicto, cuando todos los aspectos comparten un mismo propósito y una misma meta?
- ¿Cómo podría haber un sólo aspectos que estuviese separado o que tuviese mayor o menor importancia que los demás?
- Yo soy el medio por el que el Hij@ de Dios se salva, porque el propósito de la salvación es encontrar la impecabilidad que Dios ubicó en mí.
- Fui creado como aquello tras lo cual ando en pos.
- Soy el objetivo que el mundo anda buscando.
- Soy el Hij@ de Dios, su único y eterno amor.
- Yo soy el medio para la salvación, así como su fin.
- Permíteme hoy, Padre mío, asumir el papel que Tú me ofreces al pedirme que acepte la Expiación para mí mismo.
- Pues lo que de este modo se reconcilia en mí se reconcilia igualmente en Ti.
Instrucciones de la Segunda Parte de Un curso de Milagros