Debemos entender que para trabajar con los ancestros tenemos que trabajar con nosotros mism@s. Cada uno y cada una de nosotros somos el portal que nos une a ellos ya que al fin y al cabo llevamos su ADN, llevamos su fuerza, en definitiva portamos su energía.
Aquí describo un ritual en dos fases para conectar con nuestros ancestros, con sus Fortalezas, Sabiduría, Energía y Amor.
Puedes hacer solamente la fase 1 o bien las dos fases, lo dejo a tu sentir.
- Fase 1– Conectar con su Fuerza y Sabiduría, honrando todo ello.
- Necesitamos un Bol o cuenco con Agua y una Vela Blanca que colocaremos dentro del agua (podemos usar una vela flotante o idear otro mecanismo para conseguir esto, lo que se nos ocurra estará bien).
- Invocamos la fuerza del agua, ésta equilibra, regula, trasmuta energías y emociones, lo bueno y lo malo.
- Encender la vela agradeciendo, invocando, alzando alto y fuerte el amor profundo que hay dentro de nosotros y que nuestros ancestros nos regalan con cada latido de nuestro corazón. La sangre corre por nuestras venas y nos entrega sabiduría, fortaleza, experiencia que ahora colman nuestro camino sin apenas darnos cuenta. Tomamos este momento para agradecer a nuestros ancestros, pues ellos siguen vivos no sólo en nuestro corazón, no sólo en nuestra sangre sino que siguen vivos en el mundo etérico como almas que encarnaron y experimentaron aquí en la tierra.
Invocamos la fuerza del agua antes de encender la vela para que todo ese cauce de energía que estamos abriendo se regule y no nos llegue en demasía. Pues aunque la energía de nuestros ancestros está en nosotros, todo aquello que permanece dormido al ser despertado puede abrumar, así el agua se encarga de regular y encauzar esa fuente inagotable de sabiduría con la que nos estamos conectando desde un lugar sano y equilibrado. Invocamos aquello que nos nutre, que nos da fuerza, que nos abre a la conciencia de aquello que vinimos a encarnar, las herramientas que dimos por sentado que iban a estar disponibles a la hora de obrar nuestros propósitos en esta vida, Nos abrimos a ello a través de los ancestros.
- Fase 2, Purifica aquello que no nos sirve.
- Hacerlo pasados unos 3 – 5 días como mínimo de la fase 1
- Necesitamos un Plato con Arena o Tierra y
- Piedra con el símbolo del cubo de Metatrón.
- Colocar la piedra encima de la tierra o arena.
- Invocamos a la fuerza de la madre tierra, que madre tierra absorba aquello que nuestros ancestros nos enviaron en energía que nos pueda perjudicar.
- Para ello vamos a obrar un canto, un canto del alma: al colocar la piedra sobre la tierra diremos Madre Tierra libérame de todo aquello que mis ancestros estén bloqueando en mí y luego cantemos, pues el canto expresa y en la expresión se libera.
Cuando una persona libera de algo que le ha identificado durante mucho tiempo, sea bueno o malo, debe honrarlo; pues la energía, aunque la catalogamos como blanca y negra, buena y mala, la energía siempre es divina, es sagrada. Estará bien entendida o mal entendida pero siempre forma parte de la divinidad, y cuando dejamos de verla como buena o mala nos damos cuenta que el propósito siempre fue divino; entonces abrazamos aquello que nos hizo mal, cantándolo, liberándolo, dejando que no obre más mal en nosotros, dejando que se exprese de tal manera que lo que antaño fue un bloqueo en nuestro árbol familiar ahora sea una bendición llena de sabiduría.
Este segundo ritual puede hacerse hasta 3 días seguidos, con la misma piedra y realizando el canto.
Ritual extraído del video Canalizando en directo al Arcángel Azrael, minuto 11,30 del canal de YouTube Luz y Conciencia
Me encantará saber como lo has sentido, qué se ha movido en tí. Espero vuestros comentarios.
Gracias!!!!